miércoles, 20 de febrero de 2013

Ferran VII

Fernando VII recuperó el trono y llevó a cabo una dura represalia contra los liberales; de ahí que entre 1823 y 1833 hablemos de Década ominosa (abominable para los liberales). El rey impuso el absolutismo, para acabar permitiendo un despotismo ilustrado en los últimos años de su reinado. Por eso se granjeó una fuerte oposición por parte de los militares y campesinos absolutistas (rebelión organizada por la Federación de Realistas Puros, conocida como de los agraviados o malcontents catalanes en 1827, que a pesar del éxito inicial en Cervera, Vic, Manresa, Valls, Reus, Puigcerdá, terminó fracasando); y también por parte de liberales progresistas (intento fallido de revolución liberal llevada a cabo por el general José Mª Torrijos, desembarcando en Fuengirola en 1831)
Llegamos al punto de estudiar los sucesos de la Granja. En la Corte existía una continua lucha interna entre políticos absolutistas y liberales moderados por influir en el rey, cerrando filas en torno a Carlos Mª Isidro (hermano del rey)  y la reina María Cristina y su hermana la infanta Carlota, respectivamente. Desde Felipe V estaba vigente en España la ley sálica, es decir, sólo podían heredar la corona mujeres si no existían hijos varones del rey ni -en ausencia éstos- varones en todas las ramas del tronco regio. Fernando VII no tenía hijos varones. Cuando conoció en 1830 que la reina María Cristina estaba embarazada (de la futura Isabel II) derogó la ley sálica e impuso la ley de las Siete Partidas de Alfonso X que establecía como heredero de la corona al hijo varón de más edad, siguiéndole los demás varones y, de faltar éstos, la primera hija (de esta manera quería asegurarse que un hijo –varón o mujer- suyo heredase el trono). Al conocer esto los políticos absolutistas, que querían a Carlos Mª Isidro como sucesor, presionaron hasta conseguir que en 1832 el rey restableciera la ley sálica. Pero la infanta Carlota animada por los liberales consiguió obligar a Fernando VII a abolir nuevamente la ley sálica.


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